ἐν ἀρχῇ ἦν ὁ λόγος (Jn 1,1a)

"En principio era el Dicho".
Jesucristo (el Dicho) existía eternamente en el principio (en la creación).

Jn 1,15: Juan martiriza alrededor de Él (el Dicho), y ha gritado diciendo: “Éste era quien dije: el después de mi viniéndose, delante de mi ha generado, que primero de mi era” .

Jn 1,30: Este es acerca de quien yo dije: “Después de mí se viene varón quien delante de mi ha generado porque primero de mi era. 

Jn 8,53: Dijo a ellos Jesús: —Amén, amén digo a vosotros: Antes que Abraham aconteciera, yo soy. 

Jn 17,5: Y ahora, glorifícame tú, Padre, al lado tuyo, para la gloria aquella que tuve junto a ti antes que el cosmos ser. 

Jn 17,24: Padre, aquellos que me has dado, quiero que donde yo esté, también ellos estén conmigo, para que vean mi gloria que me has dado, pues me has amado desde antes de la fundación del cosmos. 

καὶ ὁ λόγος ἦν πρὸς τὸν θεόν (Jn 1,1b)

Y el Dicho (Jesucristo) existía junto a el Dios (el Padre).

Jn 1,2: Este (Dicho) era en principio junto a el Dios.

Jn 1,18: A Dios ninguno ha visto nunca, Dios unigénito, el siendo hacia el seno del Padre aquel se refirió.

Jn 3,11: Amén, amén te digo que lo que sabemos, hablamos, y, lo que hemos visto, testificamos; y el testimonio de nosotros no recibís.

Jn 3,13: Y nadie ha subido hacia el cielo si no el (hijo) bajando, procedente del cielo, el Hijo del hombre. 

Jn 3,31: El (hombre) arriba trasladando encima de todos es; el (hombre) siendo procedente de la tierra, procedente de la tierra es y procedente de la tierra habla; el (hombre) procedente del cielo trasladando [encima de todos es]

Jn 3,32: el (hombre) ha visto y oyó, esto martiriza, y el martirio de él ningún (hombre) agarra.

Jn 3,34: pues aquel a quien el Dios envió, las palabras de Dios habla, pues no procedente de medida da el Espíritu. 

Jn 6,32: Por eso dijo a ellos el Jesús: —Amén, amén digo a vosotros: No Moisés ha dado a vosotros el pan procedente del cielo, sino el Padre de mi da a vosotros el pan procedente del cielo, el Pan verdadero.

Jn 6,33: pues el Pan de el Dios, el Pan bajando procedente del cielo y vida dando para el cosmos

Jn 6,35: Dijo a ellos el Jesús: —Yo soy el Pan de la vida. El (hombre) viniendo junto a mi, de ninguna manera hambreare, y el (hombre) creyendo hacia mi, de ninguna manera sediare.

Jn 6,38: porque he bajado desde el cielo, no porque hago el anhelo, el (anhelo) de mi, sino el anhelo del (Padre) enviando a mi. 

Jn 6,41: Por eso protestaban los judíos alrededor de él, porque dijo: «Yo soy el Pan, el (Pan) bajando procedente del cielo», 

Jn 6,42; y decían: —¿No este es Jesús, el hijo de José? ¿No nosotros hemos sabido al padre y a la madre? ¿Cómo ahora dice que procedente del cielo he bajado?

Jn 6,45: Es siendo escrito en los Profetas: “Y serán todos enseñanzas de Dios”. Todo (el hombre) oyendo de parte del Padre y aprendiendo traslada junto a mi.